Abra su Biblia en 1 Corintios capítulo 7 y vamos a hacer algo que no hago con mucha frecuencia. Vamos a cubrir 40 versículos en esta noche. Entonces, van a tener que seguirnos y esta va a ser una experiencia muy, muy rica.
En los últimos dos domingos por la mañana, hemos visto Marcos capítulo 10 estudiando la enseñanza de nuestro Señor en el tema del matrimonio y el divorcio. Y ahora, llegamos al apóstol Pablo, quien nos ayuda con algunas de las implicaciones de lo que nuestro Señor enseñó. Y, de hecho, inclusive extiende lo que nuestro Señor enseñó. Y permítame mostrarle algo de la esencia de esto al señalarle unos cuantos versículos en el capítulo 7.
Versículo 10: “Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, no yo, sino el Señor: Que la mujer no se separe del marido.” Pablo les está diciendo: “les voy a decir algo que no viene sólo de mí, sino que viene del Señor.” Entonces, él se está refiriendo de regreso a la enseñanza del Señor.
No obstante, en el versículo 12, él dice: “Y a los demás yo digo, no el Señor…” Él no quiere decir que esto no es del cielo. Él no quiere decir que no es inspirado. Él simplemente quiere decir que no está citando a nuestro Señor en ese momento, refiriéndose, en el versículo 10 de regreso, al hecho de que Dios odia el divorcio y nuestro Señor afirmó eso, como vimos en Marcos 10. Les estoy dando instrucciones que vienen directamente del Señor. Aquí, él dice: “esto no viene directamente del Señor, pero digo que, si algún hermano tiene una esposa que es incrédula y ella consiente en vivir con él, él no debe divorciarse de ella.”
Ahora, él va más allá de la enseñanza del Señor a nuevas áreas de revelación divina. No es menos de Dios, sino que simplemente no citando al Señor. Versículo 25, “con respecto a las vírgenes, no tengo mandato del Señor.” No puede regresar y citar a Jesús en esto. Pero doy una opinión como alguien quien, por la misericordia del Señor, es digno de confianza. Esto viene de mí, pero pueden depender de él porque Dios en Su misericordia me ha capacitado para hablar la verdad. Inclusive, al final del capítulo, en el versículo final, él dice: “y yo considero que también tengo el Espíritu de Dios. Esto no viene de mí, sino que más bien viene del Espíritu Santo.”
Entonces, en ningún punto de este capítulo Pablo quiere decir: “les voy a enseñar algo que el Señor no está diciendo.” Él simplemente está diciéndoles: “estoy enseñándoles algo que no puedo encontrar en el escrito Escritura preciso de la enseñanza de Jesús. Pero no es menos del Espíritu, no es menos digno de confianza.”
Ahora, conforme usted avanza a lo largo de estos 40 versículos, creo que la mejor manera de hacer esto es entender que él está tratando con la Iglesia corintia. Y en la Iglesia corintia, había todo tipo de problemas, como usted sabe. Y el matrimonio era uno de ellos. El estatus matrimonial era un problema serio. Serio.
Y aparentemente, como con tanta frecuencia en las epístolas de Pablo, él está respondiendo a preguntas específicas que se le han hecho y está tratando de aclarar cosas que la gente necesita saber. Su enseñanza es igual a la enseñanza de Jesús. Es inspirada. De ninguna manera es inferior. En todo sentido, es obligatoria y tiene autoridad sobre nosotros. No toda viene específicamente y directamente de Jesús.
No obstante, el trasfondo de lo que está haciendo aquí es el caos corintio. La gente en la Iglesia corintia no vino de un trasfondo judío. Entonces, no tenía una perspectiva del Antiguo Testamento del matrimonio y del divorcio. Inclusive, una confusa como la de los judíos de la que hablamos el día de hoy. Ellos venían del paganismo, venían de la impiedad y la mundanalidad y muchos problemas maritales y existían malos entendidos.
Por ejemplo, aquí habría un escenario típico que existía en la Iglesia corintia con un grupo entero de gentiles convertidos. Roma no tuvo una ley matrimonial uniforme. Ellos estaban bajo la influencia del Imperio Romano. Y el imperio contenía, por ejemplo, muchos esclavos; y muchos de los creyentes eran esclavos. Un matrimonio en el sentido estricto y legal, ni siquiera existió para los esclavos. Un amo podía permitir lo que se le llamaba contabairnium, o literalmente, compañerismo de tienda. Diríamos, vivir juntos. Los esclavos entraban a esto sin una ceremonia y podría ser terminado si el amo decidía terminarlo. Y en cualquier momento, él podía vender a uno de los esclavos y eso lo terminaba virtualmente de cualquier manera. Es como en la actualidad las parejas que conviven.
Debido que muchos primeros cristianos fueron esclavos, es muy probable que vivieron en uniones como esas en el pasado y quizás, en uniones múltiples e inclusive, en la actualidad. Ahora, ¿qué? ¿Cuál es su status?
Más allá de los esclavos, para la gente común, había una costumbre llamada U.S.U.S., USUS, que especificaba que, si una mujer había vivido con un hombre por un año, ella era su esposa. Eso era lo que llamaríamos la ley del matrimonio en común, nada más que en Estados Unidos creo que son siete años. Otra manera de casarse para la gente común era llamada co-emptio in manum, matrimonio por venta. Usted acudía a un hombre a quien le faltaba dinero y usted compraba a su hija. Esta era una manera más bien tradicional, algo así como una especie de dote. Y el padre vendía a su hija a un marido con dinero.
Ahora, si usted va más allá de la gente común, usted llega a las clases más elevadas. Y la gente noble y un poco más, digamos, la gente noble, tenían un matrimonio llamado congfariatio, de hecho, tenían una ceremonia… La gente noble. Ellos unían sus manos, decían votos, hacían oraciones a Júpiter y a Juno, tenían anillos. Por cierto, tenían anillos. Y usted puede encontrar en la literatura romana antigua el hecho de que sacaron a un cadáver y alguien llamado Allus Alias sacaba y cortaba cadáveres y decía que ahí había un nervio que iba desde el tercer dedo de la mano izquierda directamente al corazón. Y entonces, el anillo era colocado en el tercer dedo de la mano izquierda. Esa era parte de la ceremonia. Tenían guirnaldas, velos, flores y pastel. Y entonces, ¿adivine de dónde viene su boda? De una tradición romana antigua que fue retomada por la Iglesia Católica romana y estandarizada.
La moral de la vida en el mundo romano y la vida en torno a corintio era baja. El divorcio era elevado en donde el matrimonio llegaba a existir. Y con los esclavos, en donde el matrimonio realmente no existía, el cambio de personas eran más bien un asunto constante. E inclusive la gente común, en su especie de pactos informales, los quebrantaba y se iban con otras personas.
Encima de eso, la inmoralidad estaba por todos lados. De hecho, usted puede encontrar en la literatura que los romanos tenían esposas para cocinar y para cuidar de la casa y concubinas para sus necesidades sexuales. El concubinato estaba por todos lados, la fornicación estaba por todos lados, el adulterio era algo desenfrenado. Era un mundo horrible. Inclusive, hubo un movimiento de liberación de mujeres. Jerónimo Carcopino, tiene un maravilloso pequeño libro, si puede encontrar uno, es llamado La Vida Diaria en la Roma Antigua en el cual él regresa y escarba toda la historia de estas cosas. Y él dice que hubo un movimiento de liberación de mujeres alrededor de los tiempos bíblicos en el cual, y cito, “algunas mujeres no estaban contentas con vivir sus vidas al lado de su marido, sino que vivían otra vida sin él.” Fin de la cita.
Otro escritor dice: “¿qué modestia puedes esperar en una mujer que usa un casco, odia a su propio sexo y se deleita en competencias de fortaleza?” Tenemos ese tipo de mujeres en nuestra sociedad. El mismo escritor, Juvenal, dice: “de esta manera, ella se enseñorea de su manido pero poco tiempo después, ella deja su reino, se va de una casa a otra desgastando su velo de novia mediante un uso excesivo.” Fin de la cita.
Entonces, el matrimonio en el día de Pablo era un desastre, como en nuestros días, caótico. Y, claro, entre los corintios, ahora que han venido a Cristo y se les ha enseñado el estándar de un hombre y una mujer de por vida, en un verdadero pacto, un pacto real, un pacto público delante de Dios y delante de otros, tienen todo tipo de preguntas. Y las preguntas son la mejor manera de dividir este capítulo.
Ahora, siempre hay personas que inventan la idea de que no haya matrimonio, que no haya relaciones sexuales en absoluto. Esto sería como la madre Ann Lee, quien no era madre de nadie, claro, debido a que ella no quería tener ninguna relación con un hombre. Ella comenzó un grupo llamado los Shakers o los sacudidores, que rápidamente dejó de existir por razones obvias. Y tenían esta noción que cualquier tipo de relación física era impía mala y pecaminosa y eso rápidamente inició el movimiento. En serio.
Entonces, la primera pregunta que en cierta manera podemos formular conforme entramos a este capítulo, y esto debe estar detrás de lo que está pasando conforme abre el capítulo, es hacer la pregunta: ¿acaso las relaciones físicas normales entre un hombre y una mujer, de alguna manera, están mal? ¿No son espirituales? Comencemos.
Capítulo 7, versículo 1: “En cuanto a las cosas de que me escribisteis,” y esa es la razón por la que creemos que estas son preguntas que necesitan ser respondidas, porque él se está refiriendo directamente a algo que fue escrito y que le fue enviado al apóstol Pablo. En cuanto a las cosas de que me escribisteis, y pueden imaginarse lo que estaba en esa carta en base a la historia que le acabo de describir. En base a la cultura.
Entonces, en primer lugar, bueno le sería al hombre no tocar mujer. Ese es un eufemismo para relaciones sexuales. Es bueno, está bien. Es bueno no tener relaciones sexuales. Esto quiere decir no es malo, es bueno. Está dentro de la esfera de la bondad, kalos. Está bien. El celibato está bien. Es honorable. Es excelente. Está bien no casarse. Está bien quedarse soltero. Está bien nunca hacer eso.
Pero, versículo 2: “pero,” la regla general, “a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido.” ¿Por qué? ¿A causa de qué? De las fornicaciones. Dices, quiero quedarme soltero toda la vida. ¿Eh? Bueno la soltería es buena si no es la causa de pecado sexual. La regla general es casarse. La razón es simple: debido a la tentación. Debido a la tentación. No hay lugar para la fornicación… La realidad de la vida es que, si tratas de quedarse soltero, por bueno que pueda ser el celibato, el matrimonio es la norma y el matrimonio es mejor si estar soltero resulta en tentación. Quiero que sepan que Pablo no dice cásate porque encuentras a alguien que te gusta. Él dice: “realmente cásate porque estas exponiéndote a mucho riesgo en la vida sino te casas.”
Hay seis razones para el matrimonio que apunté. Procreación, Génesis 1:28; placer, Hebreos 13:4, la cama no está contaminada, no está contaminada, placer; pureza, aquí está; provisión, tomas a una esposa para que puedas protegerla y cuidar de ella y sustentarla como el Señor lo hace con la Iglesia; compañerismo, no es bueno estar solo, necesitas una ayuda; y retrato, un retrato de Cristo en la Iglesia.
Pero allí en el medio de esto está esta noción de la pureza. Cada uno tenga su propia mujer y cada una tenga su propio marido. Versículo 3: “El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido.”
Entonces, Pablo está diciendo, “hay algunas personas que están diciendo: ‘bueno, ¿debemos nada más quedarnos solteros, debemos nada más quedarnos célibes? ¿Debemos ver el sexo como algo malo?’ ¿Por qué dirían eso? Porque primordialmente lo era en su mundo. Simplemente era inmoralidad por todos lados, adulterio por todos lados; adulterio por todos lados. Todo el tiempo. Y todo el mundo lo hacía. Entonces, algunos de ellos piensan que están adoptando una postura noble al decir: “sabes que, quizás simplemente no debemos hacer eso en absoluto,” porque era una cultura pornográfica, era una cultura baja. Y como ustedes saben, no es nada nuevo llegar a esa conclusión cuando la gente está viviendo en un tiempo de una vida de ese nivel. Creo que hubo muchos monjes medievales que llegaron a esa conclusión, que la postura noble elevada era ser célibe. Estaban viendo las relaciones sexuales de cualquier tipo en cualquier relación como algún tipo de contaminación.
Pablo dice: “miren, está bien ser soltero, está bien vivir sin ninguna relación con el sexo opuesto, pero es mucho mejor casarse debido a las fornicaciones. Y después, cuando te casas, tienes el deber de cumplir el uno con el otro.” Ese deber, obviamente, es expresar el afecto físico que es coherente y es ordenado por Dios para la procreación y el placer de la gente en un matrimonio. De hecho, el deber es tan elevado en un matrimonio que la esposa ni siquiera tiene autoridad o potestad sobre su propio cuerpo, el marido la tiene. Y de la misma manera, el marido no tiene potestad o autoridad sobre su propio cuerpo, sino la mujer. Entonces, dejen de negarse el uno al otro.
Pablo dice que eso no es lo que Dios está pidiendo. Vean la cultura en la que viven y la historia, de dónde han salido en el pasado y todo eso y quizás, quieren decir esto. Esta es la postura elevada, la postura noble en esta cultura que está enfocada y saturada por el sexo. Y es simplemente decir ‘nunca haré eso. Voy a vivir una vida de abstinencia completa y éste el nivel de pureza.’ Pablo dice eso está bien, no está mal, eso no es malo, pero para la mayoría de la gente, esto va a llevar a fornicación. Entonces, tengan a su propia esposa, tengan a su propio marido; y cumplan sus propios deberes el uno con el otro y no se nieguen el uno al otro de eso.
A menos de que, versículo 5: “No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración.” Si hay alguna exigencia en tu vida, algún trauma en tu vida, algún asunto en tu vida, algo así como ayunar de alimento que te consume con tristeza, ese tipo de cosas que ocupan tu mente, están de acuerdo en hacer eso. Pero vuélvanse a unir. ¿Por qué? Para que Satanás no los tiente debido a su falta de dominio propio. No hagan eso. Le van a dar oportunidad a Satanás.
Entonces, lo opuesto es el caso. ¿Creen que van a ser más puros al retener eso? La verdad es que van a seguir por el camino que Satanás quiere que vayan: a pecar, porque van a verse tentados debido a su incapacidad de ejercer dominio propio. Cásense por causa de la pureza y cuando estén casados, cumplan su pacto matrimonial físicamente, no se nieguen el uno al otro excepto por alguna causa grande espiritual y vuélvanse a unir para que no se coloquen en una posición en la que Satanás los tiente debido a su falta de dominio propio.
Ahora, Pablo dice esto en el versículo 6: “Mas esto digo por vía de concesión, no por mandamiento. Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo; pero cada uno tiene su propio don de Dios, uno a la verdad de un modo, y otro de otro.” Lo que él está diciendo es ‘miren, el celibato es un don. Es un don. Y yo simplemente estoy concediendo en ese hecho, no mandándolo. No puedo mandar el celibato porque eso no estaría bien. Pero yo, a manera de concesión, diría: “me gustaría que fueran como yo,”’ lo cual es decir que ¿qué? Él no está casado.
¿Él se llegó a casar? La mayoría de nosotros pensamos que sí estuvo casado porque llegó a ser miembro del sanedrín y tenía que estar casado para ser miembro del sanedrín. ¿Qué le pasó a su esposa? Quién sabe. No sabemos. No pensamos que la dejó en casa y se fue por el resto de su vida. Entonces, él probablemente la perdió mediante la muerte. Él dice los corintios en 1 Corintios capítulo 9: “un hombre tiene el derecho de tener una esposa.” Tiene ese derecho. Pero Pablo no ejerció ese derecho y fue basado en el hecho de que cada hombre tiene su don de Dios.
Y eso es de lo que estamos hablando, del don de la soltería. El don de la soltería. Y ese es un don. Y si pasan al versículo 32, “quiero que estén libres de preocupación. Uno que no está casado está preocupado por las cosas del Señor, de cómo va agradar al Señor. Pero el que está casado está preocupado por las cosas del mundo, de cómo él debe agradar a su mujer y sus intereses están divididos,” versículo 34.
Entonces, hay algunos beneficios al estar soltero. Si se ha recibido ese don por parte de Dios, cada hombre tiene su propio don. El celibato es un don. ¿Y se acuerdan de lo que los discípulos dijeron ahí atrás en Mateo 19? Leímos eso hoy. Los discípulos le dijeron a Jesús después de Su enseñanza del divorcio: es mejor no casarse. ¿Y qué dijo Jesús? Pero no todos los hombres pueden de recibir eso. No todos pueden recibir eso. Está bien, es bueno, es honorable. Tiene gran potencial para mantenerte enfocado y concentrado, pero es un don. Es un don único. El don es mejor conocido por aquellos que sienten un consuelo fuerte, completo en estar solteros y no tienen un deseo fuerte por un cónyuge. Por un cónyuge íntimo, por un cónyuge de por vida. Es una opción.
Pero por favor, no concluyan que hay algo de malo con un don dado por Dios de intimidad física. La soltería, lo último que Dios quiere de la soltería es promiscuidad sexual. Sé soltero si ese no es un problema. Si ese es un problema, cásate.
Muy bien, la siguiente pregunta en su mente, probablemente en esa carta que recibió de ellos, ¿acaso los que antes estuvieron casados deben volverse a casar? Y él comienza a hablar de esto en el versículo de 8 y cambia el enfoque. “Digo, pues, a los solteros y a las viudas,” estas serán dos categorías de personas que antes estaban casadas. Un viudo es alguien cuyo cónyuge murió, ¿verdad? Todo el mundo sabe eso. Es entendido universalmente.
Pero, ¿quiénes son los solteros? Bueno, no pueden ser viudas porque están los solteros y las viudas. Ahora, sólo hay dos maneras en las que usted puede estar casado y después, no puede estar casado. O enviudó o se divorció. Eso tiene que ser lo que eso significa. Entonces, aquellos que se han divorciado, llamados los solteros y a las viudas, es bueno para ellos si se quedan como yo. Los solteros son los que antes estuvieron casados. Los agamos, gamos, la idea de casados y después, la a, alfa privativa, gente divorciada. Versículo 11: “si ella se va, ella debe permanecer no casada o reconciliarse con su marido.” De nuevo, el mismo significado tiene que estar ahí en mente en el versículo 34. Tienes a los solteros y a la virgen. Los solteros no son las viudas y los solteros no son las vírgenes.
Entonces, ¿quiénes son los solteros? Tienen que ser personas que fueron casadas y ahora ya no están casadas. Entonces, gente que antes estuvo casada, ahora es soltera por la muerte, viudas o solteros por divorcio, solteros ¿qué dice Pablo? Versículo 8: “bueno, está bien.” De nuevo, es bueno estar soltero. Entonces, es bueno quedarse soltero. Es bueno para que puedas servir, para que puedas estar libre como los versículos 32, 33 y 34 lo señalan.
Pero observe en el versículo 9: “si no tienen dominio propio,” ¿qué? Cásense. Es mejor casarse que estarse quemando. No quemar en el infierno, sino quemar, arder con deseo. Está bien. Estuviste casado, ahora estás soltero. Sé soltero, quédate soltero. Mantente enfocado, vive tu vida de este modo. Eso es preferible. Creo que ese es un gran consejo del apóstol Pablo. Gran consejo.
Pero si necesitas casarte, si ese es un problema físicamente, cásate. Y recordarán en 1 Timoteo 5:14 el apóstol Pablo presenta esto de manera muy clara cuando está hablando de viudas ahí. Él dice: “quiero pues que las viudas jóvenes se casen, críen hijos, guarden su casa, que no den al adversario ninguna ocasión de maledicencia. Porque algunas ya se han ido en pos de Satanás.” No debes tener a muchas viudas jóvenes con todos sus deseos siendo vulnerables a cosas malas a su alrededor. Quédate soltero si puedes. Pablo fue capaz y él se enfocó y a él se le dio ese don. Indica que Dios puede dar ese don inclusive después del matrimonio, si Él así lo desea. Debes estar convencido de que Dios ha permitido tu soltería para propósitos santos. Para propósitos santos. Entrega tu vida al Reino. Esto es retomado en el versículo 26: “que hará bien el hombre en quedarse como está. ¿Estás ligado a mujer? No procures soltarte. ¿Estás libre de mujer? No procures casarte.”
Si no puedes recibir esto, es bueno. Porque es difícil en el mundo. Y el mundo en el que vivían era como el mundo en el que vivimos. “Mas también si te casas, no pecas; y si la doncella se casa, no peca;” ellos estaban haciendo este tipo de preguntas. Esta idea de abstinencia por lo visto se había apoderado de ellos. Está bien casarse. Está bien quedarte soltero. Sin embargo, cuando lo hagas, “Pero los tales tendrán aflicción de la carne, y yo os la quisiera evitar.” Si puedes ser soltero, simplifica tu vida. Reduce la esfera de tus problemas. Tienes suficientes problemas contigo mismo, te casas con alguien y ahora tienes a dos personas, dos pecadores chocando y tienes a muchos hijos y tienes a seis pecadores chocando el uno con el otro; y simplemente, continúa. Hay algo que debe decirse para tan sólo un pecador. Reduce el nivel de conflicto. No obstante, esto asume que uno puede enfrentar ese tipo de situación.
Y en el versículo 29, él inclusive dice: “Pero esto digo, hermanos: que el tiempo es corto; resta, pues, que los que tienen esposa sean como si no la tuviesen; y los que lloran, como si no llorasen; y los que se alegran, como si no se alegrasen; y los que compran, como si no poseyesen; y los que disfrutan de este mundo, como si no lo disfrutasen; porque la apariencia de este mundo se pasa.” Pablo está diciendo: si puedes quedarte soltero, simplifica tu vida y puedes entregar tu vida sólo en el Reino. Pero tienes que tener un don para hacer eso o de lo contrario, se convierte en un medio horrendo de tentación.
Entonces, la pregunta es: ¿acaso la actividad sexual no es espiritual? No. La soltería es buena. El matrimonio es bueno, si no tienes el don de soltería, acaso los que antes estuvieron casados, ¿deben volverse a casar? Sí, si desean casarse, porque es mejor casarse que estarse quemando. Pero si puedes permanecer soltero, permanece soltero y enfócate en el Reino.
Otra pregunta que aparentemente es presentada aquí es: ¿Cuáles son las alternativas para aquellos que están casados? ¿Cuáles son las alternativas para aquellos que están casados? Ahora, entienda lo que sucede. Quizás, una esposa llega a oír el Evangelio. Ella cree en el Evangelio y es salva. Y ahora, ella tiene un marido inconverso. ¿Acaso ella está una situación en la que ella está ligada en yugo desigual con un incrédulo? ¿Acaso ella tiene una relación con una persona quien es parte del reino de Satanás? ¿Es esto Cristo con Belial, en el lenguaje de Pablo, usted sabe, en la carta de 2 Corintios? ¿Acaso esta es la luz y las tinieblas unidas? ¿Es esto pecado y justicia unidos? Estaban haciendo este tipo de preguntas y claro, la enseñanza del Señor era nada de divorcio.
Entonces, viene la pregunta, ¿qué alternativas existen para aquellos que están casados? Versículo 10: “Pero a los que están unidos en matrimonio,” aquellos de ustedes que están casados. Ahora antes, les estaba hablando aquellos que estaban ¿qué? Solteros. Si pueden quedarse solteros, es bueno. Pero es mejor casarse, si eso es lo que necesitas.
Ahora, él les va a hablar a los casados: “mando, no yo, sino el Señor.” Y aquí esto es directamente del Señor. Mateo 5; Mateo 19; Marcos 10; “Que la mujer no se separe del marido.” ¿Por qué? Porque Dios odia el divorcio y porque Dios une a toda pareja. Lo que Dios unió, no lo separe el hombre. Entonces, él reitera lo que el Señor enseñó. Dios odia el divorcio. No se divorcien. Un hombre, una mujer en una unión son uno indivisible de por vida, sin separación.
Ahora, usted llega al versículo 12: “Y a los demás yo digo, no el Señor,” esto es de mí, esto lo digo yo, el Señor no ha dado ninguna instrucción acerca de esto en manera específica. Si un hermano tiene una esposa que es incrédula, y ella consiente en vivir con él, esta es la situación opuesta. Pero en este caso, este es un hermano que tiene una esposa. Y en este caso, ella es la incrédula, pero ella quiere vivir con él. ¿Acaso él debe divorciarse de ella simplemente porque es una incrédula? La respuesta es no, él no debe divorciarse de ella. Y una mujer, versículo 13, que tiene un marido incrédulo y él consiente vivir con ella, ella no debe despedirse del esposo o divorciarse de su marido.
¿Por qué? Porque el marido incrédulo es santificado mediante su esposa y la esposa incrédula es santificada mediante su marido creyente, porque de otra manera, vuestros hijos son inmundos, pero ahora son santos. ¿Qué es lo que eso está diciendo? Eso está diciendo: mira, si tu cónyuge incrédulo te ama y quiere quedarse contigo, y quedas en ese matrimonio. ¿Por qué? Porque te conviertes en el instrumento santificador en la vida de ese incrédulo y en los hijos de esa unión, porque tú eres el que está recibiendo la gracia de Dios que está haciendo derramada en tu vida y eso va a salpicar a aquellas personas incrédulas y a tu marido o a tu mujer y a tus hijos. En lugar de que el cristiano, escuche, sea contaminado por el incrédulo, el incrédulo es contaminado por la presencia del cristiano. No estamos hablando de salvación aquí. Simplemente, estamos hablando de las bendiciones puras, maravillosas de Dios cayendo en un creyente y salpicando a un incrédulo y haciendo que un hogar sea más puro, más limpio, más atractivo.
Dios derrama Sus bendiciones en Sus redimidos y en los hijos de Sus redimidos. Y entonces, es lo opuesto de lo que estaban pensando. Necesito quitarme a ese cónyuge, porque es un pagano, me va a contaminar. No. Tú serás el medio de influencia santificadora en él. No obstante, el versículo 15 crea otro escenario: “si el incrédulo se va, déjelo irse.” Déjelo irse. Literalmente, si él se saca a sí mismo, este es el verbo, si se elimina a sí mismo, chorizo, término técnico para el divorcio, si un incrédulo se divorcia de un creyente, déjenlo ir. El hermano o hermana no está bajo servidumbre. En tales casos, Dios nos ha llamado a la paz. Aquí está la segunda decepción para el divorcio. La primera es el adulterio. Vimos eso en Mateo 19, Mateo 5. La segunda es un incrédulo divorciándose de un creyente. No están en servidumbre. El vínculo es quebrantado. El vínculo es quebrantado. Ya no están ligados. Romanos 7: “la mujer casada está ligada por la ley a su marido mientras que ella vive. Si su marido muere, ella es liberada de esa ley.” El mismo lenguaje aquí, si un incrédulo se va, no están ligados.
¿Qué significa eso? La unión ha sido quebrantada, ya no están ligados por ella, lo cual entonces, asume que tienes el derecho de volverte a casar si un incrédulo se va porque Dios nos ha llamado a paz y las bendiciones de la paz son lo que Dios quiere para Sus hijos. Dices: “bueno, creo que me voy a esperar hasta que muera. Creo que voy a pelear por este hombre hasta el final. Creo que realmente voy a hacer que le sea imposible divorciarse de mí, porque quiero verlo salvo.” Bueno, no obstante, versículo 16, es escrito para ti: “¿cómo sabes, oh esposa, que salvarás a tu marido?” Eso es bastante práctico, no es cierto, el matrimonio no es una herramienta evangelística. Es un contexto evangelístico, pero no creas que simplemente por aferrarte a este hombre de alguna manera que lo vas a salvar. ¿Cómo sabes si lo vas a salvar? ¿Cómo sabes, marido, si vas a salvar a tu esposa? Este es el punto. No tienes conocimiento de ello. Cuando la persona inconversa está determinada a irse y buscar un divorcio, no necesitas perpetuar la atención y la frustración y el odio y la enemistad bajo alguna noción de que, quizás tú seas la única persona en el planeta que puede ser el instrumento de salvación. Eso es algo que Dios decide.
Bueno, el resumen viene en el versículo 17. Y esto responde a otra pregunta. ¿Acaso la salvación cambia nuestro estatus matrimonial? En cierta manera, hemos estado lidiando con eso. Nada más que el Señor ha asignado a cada uno como Dios lo ha llamado, en esta manera, así ande. Sólo como el Señor ha asignado a cada uno, como Dios ha llamado a cada uno, en esta manera, así ande. La salvación realmente no cambia nada. Ahora que usted es un creyente, usted no tiene que dejar el sexo, tiene que deshacerse de su cónyuge. No cambia nada.
Y él da algunas ilustraciones y analogías. ¿Fue llamado alguno siendo ya circuncidado? Si fuiste salvo cuando eras judío, puedes quedarte así. No te vuelvas incircunciso. Si fuiste llamado en la incircuncisión, no te circuncides. La circuncisión no es nada y la incircuncisión no es nada. Pero lo que importa es guardar los mandatos de Dios. Y eso es simplemente una analogía y una ilustración para decir que todo el mundo se queda en la condición en la que fue llamado.
Entonces, si fuiste llamado soltero, eso no cambia. Si fuiste salvo casado, eso no cambia. Si fuiste salvo y de pronto, tu cónyuge incrédulo quiere divorciarse de ti, quédate como estás. Quédate como estás. Fuiste llamado siendo esclavo, versículo 21. No te preocupes por ello. Si puedes liberarte, hazlo. Si hay un camino a la libertad, tómalo, porque el que fue llamado en el Señor mientras que es esclavo, en el Señor es liberado. Eres liberado en Él de cualquier manera. De la misma manera, el que fue llamado siendo libre es esclavo de Cristo. Fuiste comprado por precio, no se conviertan en esclavos de los hombres. No dejes que nadie dicte lo que debes hacer. Hermanos, cada uno debe quedarse con Dios en esta condición en la que fue llamado.
Entonces, ¿cómo se manifiesta eso? Vienes, recibes al Señor Jesucristo, eres un marido convertido, tienes una esposa no salva, eres una esposa convertida, tienes un marido no salvo, ¿qué debes hacer? ¿Negarle una relación física? ¿Divorciarte de él? ¿Echarlo de la casa? No. ¿Correrlo de la casa? No. Quédate en donde estás. Quédate en donde estas. Eres soltero y vienes a Cristo. Ahora, ¿debes ser un monje el resto de tu vida? ¿Debes ser célibe el resto de tu vida? No. Si tienes este don, está bien. Sino, cásate. Cásate. Soltero o casado, lo que Dios quiere en cualquier situación en la que estés, quédate de esta manera. Esto es tan importante porque el cristianismo nunca tuvo la intención de destrozar o de deshacer familias. Lo opuesto es el caso. A menos de que ese incrédulo quiera irse, te conviertes en la influencia santificadora para el que se queda.
Entonces, ¿acaso nuestras relaciones sexuales son de alguna manera algo no espiritual? No. ¿Acaso aquellos que fueron salvos después de que enviudaron o se divorciaron deben volverse a casar? Sí, sí tienen la libertad de volverse a casar o quedarse soltero. Sea lo que sea la voluntad de Dios para ti. ¿Cuáles son las alternativas, entonces, para la gente casada? Para los cristianos. No divorcio. Y si te vas, no te vuelves a estar con nadie más y regresas con tu marido. Esas son tus dos opciones. Si estás casado con un no cristiano, y el no cristiano decide divorciarse de ti, déjalo que suceda. Tienes libertad de volverte a casar.
Ahora, hay otra pregunta en la mente de Pablo en este punto y tiene que ver con las vírgenes, versículo 25. “Ahora, con respecto a las vírgenes,” estos son los que nunca se han casado. Hemos hablado de los solteros y los casados y los viudos y los que antes estuvieron casados, divorciados. Y ahora, llegamos las vírgenes.
Ahora, esto es probablemente lo que estaba pasando. Ahora tenemos el panorama general. Tienen esta cultura sexualmente pervertida y quieren distanciarse a sí mismos del mundo. Y entonces, llegan a las conclusiones de que, si tan sólo se distancian a sí mismos completamente de las relaciones físicas, ésta va a ser la postura espiritualmente elevada. Por lo tanto, había personas que nunca se habían casado, hombres y mujeres. Vírgenes cubriría a hombres y mujeres que nunca se habían casado. Nunca habían conocido a un hombre, tomando el eufemismo bíblico. ¿Qué hacen? ¿Acaso sólo se quedan así? Parthenoi, es utilizada en Apocalipsis 14:4 una vez para referirse a hombres. Esa es la razón por la que digo que pueden ser hombres o mujeres, en la mayoría de los casos, se refiere a mujeres. Estas son personas que nunca habían tenido una relación. Entonces, no tengo mandato del Señor. El Señor no dijo nada. El Señor no dijo nada. No obstante, les voy a dar mi juicio, literalmente como alguien quien por la misericordia del Señor es digno de confianza o fiel. Les voy a dar un juicio fiel como alguien quien es digno de confianza debido a que él es inspirado por el Señor. Creo que es bueno, a la luz de la aflicción actual, que es bueno que un hombre se quede como está. Entonces, si puedes ser soltero, de regreso al versículo 1, versículo 8, quédate soltero. Vienen tiempos difíciles.
Por cierto, estaban a 17 años de la primera persecución general bajo Diocleciano, el sexto emperador de Roma. Y fue una masacre de cristianos. Entonces, él está diciendo: mira, si eres soltero y nunca te has casado, entonces no estás ahora casado con un creyente o un incrédulo, no estás divorciado, no has enviudado. Estás en la categoría de que nunca te has casado. Hombre, este es un buen lugar en donde estar. Ese es un buen lugar debido a la aflicción actual. Los desafíos que están por venir, va a ser un tiempo difícil. En unos cuantos años, a partir de aquí, algunos de ustedes van a ser matados. La persecución de Diocleciano abarcó al mundo romano.
Pero, versículo 28, ya leímos de los versículos 26 y 27, versículo 28: Si te casas no es pecado y si una virgen se casa, no ha pecado. ¿Están comenzando a entender el panorama de lo que estaban preguntando? Que la soltería parece ser lo correcto. Ninguna relación sexual parece ser lo correcto. Y él está haciendo todo eso a un lado. Miren, hay problemas en el mundo. La soltería es maravillosa, porque no van a traer una familia al mundo y después van a ver a tus hijos siendo quemados en una estaca, a tu esposa. Hay algo que debe decirse por estar soltero en un tiempo de persecución terrible, aterradora.
Pero si te casas, no es pecado. Y si una virgen se casa, ella no ha pecado. Sin embargo, ellos tendrán aflicción en esta vida. Y estoy tratando de evitárselas. Tendrán thlipsis, la palabra para problemas, presión. Van a ser aplastados. Literalmente, significa ser presionado, porque entendemos esto, ¿no es cierto? La persona soltera se preocupa por su propia vida. La persona casada de pronto se preocupa por su esposo y por sus hijos. O ella se preocupa por su marido y sus hijos.
Y después, dice en el versículo 29: “mira, es un tiempo corto.” La vida es un tiempo corto. Para algunos de ustedes es un tiempo muy corto, porque van a verse atrapados en la persecución. Entonces, partir de ahora, aquellos que tienen esposas, debe ser como si no las tuvieran. Aquellos que lloran, como si no llorasen. Y aquellos que se regocijan, como si no se regocijasen. Y aquellos que compran, como si no poseyesen. Y aquellos que usan del mundo, no si no lo usaran a plenitud, porque la forma de este mundo está pasando.
El matrimonio no tiene relación a lo eterno, ¿verdad? Se acuerda cuando le dijeron a Jesús ¿la esposa de quién será ella en el cielo? Y Jesús dijo: “en el cielo no se casan ni se dan en casamiento.” Éste es un buen consejo. Pablo dice la presión del sistema, los problemas de la carne, vivir en esta vida y la naturaleza pasajera del mundo significa que, si puedes concentrarte en las cosas eternas, en tiempos difíciles, simplificarás tu vida. Todos vamos a tener que simplificar. Todos vamos a tener que tomar medidas. Todos vamos a tener que vivir en estos tiempos difíciles, difíciles. Pero para la gente soltera, la vida es mucho más simple y no es tan amenazadora o peligrosa o dolorosa.
En el versículo 32, él añade: “Quisiera, pues, que estuvieseis sin congoja. El soltero tiene cuidado de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor; pero el casado tiene cuidado de las cosas del mundo, de cómo agradar a su mujer.” Y eso es exactamente lo que debe preocuparle. Exactamente. La gente casada tiene preocupaciones divididas. Una responsabilidad dividida. Sus intereses están divididos, versículo 34: “Hay asimismo diferencia entre la casada y la doncella. La doncella tiene cuidado de las cosas del Señor, para ser santa así en cuerpo como en espíritu; pero la casada tiene cuidado de las cosas del mundo, de cómo agradar a su marido.” Y eso es exactamente lo que debe preocuparle. Y las cosas del mundo, eso no significa cosas pecaminosas, simplemente los asuntos de la vida.
“Esto lo digo para vuestro provecho; no para tenderos lazo, sino para lo honesto y decente, y para que sin impedimento os acerquéis al Señor.” ¿Y saben una cosa? Pablo estaba viviendo esto como un hombre soltero que una vez había estado casado. Y él entendió el enfoque singular de esto. Él aconseja a estas vírgenes de la misma manera que él aconsejó a los que antes estuvieron casados en este pasaje y dice: “quédense donde están. Si están casados, quédense casados. Y si están solteros, y pueden hacerlo, quédense solteros. Y si eres una virgen y puedes enfrentar eso, quédate así. Quédate así.”
Entonces, el meollo hasta este punto es que volverse un cristiano no necesariamente significa que tienes que hacer alguna alteración dramática de tu estado civil. Eso no es lo que el Señor demanda.
Aquí quedan dos preguntas ¿acaso los padres deben evitarles a sus hijas las dificultades del matrimonio y mantenerlas vírgenes de por vida? Hombre, algunos padres con intenciones muy buenas estaban diciendo: ‘bueno, no quiero que te cases con alguno de estos hombres en el mundo ahí afuera. No quiero que quieras tengas que enfrentar todo eso, toda la inmoralidad de la que pudieron haber sido parte en sus vidas en el pasado.’ Pueden entender esto. Un padre viene a Cristo, el padre está en la Iglesia, tiene hijas jóvenes. Hay otros hombres en la Iglesia. Están ahí los jóvenes en la Iglesia, hombres solteros en la Iglesia. Pero sus vidas antes de Cristo fueron vidas muy pecaminosas.
Y entonces, aquí está este padre anticristiano que les dice a sus hijas, a quienes él está criando en las cosas de Cristo, ‘no quiero que se casen’. ‘No quiero que hagan eso.’ ‘Quiero que sean puras,’ ‘quiero que estés entregada a Cristo,’ ‘quiero que estés enfocada en la vida de la Iglesia,’ ‘voy a cuidar de ti como tu padre,’ ‘voy a cuidar de tu vida.’ ‘Puedes quedarte en casa y puedes pasar su vida en el servicio del Señor y honrando al Señor.’
Y entonces, aparentemente, algunos de estos padres pensaron que esta era realmente una idea maravillosa. Pablo necesita responder esto. Versículo 36: “Pero si alguno piensa que es impropio para su hija virgen que pase ya de edad, y es necesario que así sea, haga lo que quiera, no peca; que se case.”
¿Sabe lo que pasó? Algunos padres estaban haciendo una promesa. Voy a mantenerse virgen, voy a protegerte de este mundo pecaminoso impío. Voy a protegerte de estos hombres, no te voy a colocar en una posición en la que tengas que casarte y enfrentar todos los problemas de la vida. Voy a cuidar de ti. Y la niña crece, llega a la madurez, y ella ya dejó la niñez y ella quiere casarse. Y él, en cierta manera está en una situación difícil. Está preguntando: “bueno, ¿qué hago?” Él ahora cree que está actuando de manera inapropiada hacia su hija. Ella no quiere esto.
Entonces, Pablo dice: “deja que se case. Déjala casarse.” Pero, por otro lado, versículo 37: “Pero el que está firme en su corazón, sin tener necesidad, sino que es dueño de su propia voluntad, y ha resuelto en su corazón guardar a su hija virgen, bien hace.”
Entonces, tanto el que da a su hija virgen en matrimonio hace bien y el que no la da en matrimonio hará bien, si esto le agrada a ella. Pero si llega al punto en donde esto ahora es una acción que no es apropiada para ella, esto es tan molesto para ella que no lo desea, que no lo quiere, entonces déjela casarse.
Entonces, si ella quiere quedarse soltera, mantenla así. Cuida de ella. Deja que ella invierta su vida en el Reino, en la extensión del Reino, en la extensión del Evangelio. Pero si ella quiere casarse, deje que se case. Dios puede guiar a través de los padres, tengo que creer eso. Pero algunas veces podemos tener planes que realmente no tienen sentido. Los padres en esos días hacia contratos y probablemente, algunos de estos padres habían hecho algún tipo de pacto, usted sabe, tenemos esto en la actualidad, usted sabe. La gente hace pactos de abstinencia y cosas así. Eso está bien para la gente soltera, pero sería torpe para un padre decir que este es un pacto de por vida, porque realmente no sabes hasta que pase el tiempo y una hija llega a un nivel de madurez, para saber si ella puede o no enfrentar el hecho de estar soltera o casarse. De cualquier manera, un padre que se preocupa por una hija y ella se queda en casa y se enfoca en el Señor y el Reino hace bien, si ése es el deseo de ella. Un padre que deja que ella se case también hace bien.
Bueno, no queda nada excepto dos versículos. ¿Acaso las viudas deben volverse a casar? ¿Acaso los viudos deben volverse a casar? Y también podemos colocar aquí el divorcio. Una esposa está ligada mientras que su marido vive. Pero si su marido está muerto, ella está libre para casarse con quien ella quiera con una provisión. ¿Cuál es? Con tal que sea en el Señor. Sólo cásese con creyentes. Sólo en el Señor. No obstante, en mi opinión ella está más contenta si ella permanece como está. Eso es tan sólo una opinión. Él les dice: “miren, sólo le puedo decir como un hombre que estuvo casado y como un hombre que estuvo soltero. Es más simple. Y yo considero, al decir esto, les estoy dando la mente del Espíritu Santo. Y esto les digo a los que son solteros, particularmente, si pueden permanecer solteros en el servicio de Cristo, háganlo. Pero no a expensas de su pureza. Si ese es un problema, cásense. Y si ese es un problema, no pospongan su matrimonio, porque el matrimonio pospuesto constituye una vida soltera ilegítima. Si no tienes el don de soltería, cásate.”
Siempre me hace temblar un poco cuando alguien dice: “sí, hemos decidido casarnos.” “Oh, muy bien, ¿cuándo se van a casar?” “Un año a partir de este marzo.” “Oh, ¿en serio?” Exactamente, ¿que podría pasar entre ahora y ese entonces? ¿Tienes alguna idea? Yo soy un firme creyente en darle un anillo a una mujer y casarte con ella en un lapso de 60 días. “Oh, no puedes planear bien la boda.” Olvídate de eso. Olvídate de eso. ¿Cómo que planear la boda? Mira, tengo un plan, tengo un plan. Hacemos las bodas aquí, podemos hacerla en algún momento del día del Señor en la tarde, simplemente, tenemos a toda la gente que quiera casarse, pase al frente, no tienen que pagar nada, todo el mundo usa las mismas flores, simplemente, vamos a disfrutar mucho del tiempo juntos. La Iglesia está aquí, ustedes cantan muchas canciones maravillosas, van a disfrutar de un gran tiempo.”
¿Sabe qué? Un pastor trató de hacer eso. Y al final del servicio, hacen eso en Rusia, por cierto, he estado en esos servicios. Y he estado en las bodas que ocurren inmediatamente después del servicio el domingo por la mañana. Realmente, son maravillosas. Un pastor dijo que iba a hacer eso. Se levantó después del sermón, y él dijo: “si son tan amables de pasar al frente aquellos que quieren casarse”. Y es un hecho que tres solteros y 42 solteras mayores pasaron al frente. Entonces, tienes que poner algunos límites en cómo eso funciona. Digo, tienes que escoger al que va hacer tu cónyuge antes del domingo, antes de pasar al frente, ¿muy bien?
Bueno, todo eso para decir: Pablo nos da ayuda muy práctica aquí, ¿no es cierto? En este capítulo. Realmente, opciones maravillosas. Y así es nuestro Señor, no es cierto, quien nos da tanta gracia. Una gracia tan maravillosa. Para la gente soltera, no se tarden. Si Dios ha diseñado que tú te cases, cásate. Si está divorciado o has enviudado y puedes permanecer soltero, quédate soltero. Y si tienes base para volverse a casar, cásate. Si has enviudado y puedes permanecer soltero, no te cases. Si está casado con un creyente, permanece. Y si estás casado con un incrédulo y él quiere quedarse o ella quiere quedarse, permanece y sé una bendición santificadora la familia. Y si estás cansado con un incrédulo que quiere irse, déjalo, no estás en esclavitud a esa persona.
Bueno, dices, yo estoy tan lejos en el proceso, ya he echado a perder todo eso. Bueno, te va a dar gusto saber que, si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad, ¿verdad? Él perdona. Debió haber habido muchos así en Corinto, quienes estaba buscando Su perdón. Acepta Su gracia y vive a partir de hoy de la manera en la que Él nos manda vivir.
Padre, ha sido emocionante en las últimas tres semanas simplemente escarbar en esto un poco y esperamos tener un mejor entendimiento de Tu Verdad en esto. Y sabemos que lo que Tú nos das es para nuestro bien. Y es para que podamos colocarnos en el lugar de gozo máximo y bendición máxima; y todos necesitamos perdón Señor, por tantas cosas en nuestras vidas. Y hay personas quienes en esta congregación en esta noche están sintiendo algo del dolor de romper Tu ley en el pasado. Pero Tú eres un Dios de perdón. Y Tú nos limpias de todos nuestros pecados según las riquezas de Tu gracia que son provistas para nosotros de manera interminable y sin límites en Cristo. Y todo lo que pides de nosotros es que confesemos, que nos arrepintamos y que comencemos un patrón de obediencia en nuestras vidas ahora.
Oro, Señor, porque Tu gracia de sobre todos nosotros y porque Tu poder esté en nosotros para capacitarnos para vivir como Tú quieres que vivamos, seamos solteros o casados. Sea lo que Tú tienes para nosotros, que sepamos eso claramente, que vivamos en gozo en medio de esto y que Tú proveas para nosotros lo que necesitamos tanto para ser lo que Tú quieres que seamos. Te damos gracias en el nombre de Tu Hijo. Amén.
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